La iniciativa europea “Smart City” se centra en la problemática de sostenibilidad de las ciudades actuales y, más específicamente, de los sistemas energéticos (European Commission, 2010a). En este caso, una Smart City se define implícitamente como una ciudad que mejora la calidad de vida y la economía local, avanzando hacia un futuro bajo en emisiones de CO2. Las inversiones en eficiencia energética y en energías renovables locales, junto a la reducción en el consumo de energía fósil y de emisiones de CO2, constituyen herramientas que ayudan a alcanzar la sostenibilidad y mejoran la calidad de vida en una ciudad.

 

“Smart City” conlleva medidas innovadoras respecto a la gestión de la energía (incluyendo las redes de transporte, los edificios y el transporte), la reducción en gran medida del uso de combustibles fósiles y la disminución de emisiones de CO2; todo ello enfocado al cumplimiento de los objetivos marcados por la UE para 2020.

Esta iniciativa pretende alcanzar una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero del 40% en 2020 (respecto a 1990), lo que, además de los beneficios en el ámbito medioambiental y energético, supone un incremento del empleo local y una mejora en la calidad de vida de los ciudadanos. Asimismo, persigue la implantación del concepto “Smart City” en el 5% de la población de la Unión Europea, activando el desarrollo de nuevas tecnologías no contaminantes y eficientes. Por último, hace especial hincapié en la difusión de las “mejores prácticas” de energía sostenible implementadas a nivel local.

En el ámbito del urbanismo y la vivienda sostenible, esta iniciativa europea incide en la planificación de un desarrollo urbano sostenible y el análisis de necesidades y riesgos identificados (inundaciones, terremotos, etc.) para gestionar correctamente la densificación de población y alcanzar un resultado sostenible desde el punto de vista social, ambiental y generacional. Igualmente, “Smart City” considera una serie de factores de habitabilidad en edificios tales como la verificación acústica, la certificación de sostenibilidad, la seguridad, etc.